08-11-2016, 16:36
Sóller, tres meses de cierre por obras
08-11-2016
A partir del 7 de noviembre el tren de Sóller cierra sus puertas hasta la próxima temporada. Un cierre que durará alrededor de tres meses para llevar a cabo las tareas de mantenimiento habituales y de consolidación de los túneles 1, 2 y 3 que atraviesa el tren centenario por la Serra d’Alfàbia. El presidente del Ferrocarril de Sóller, Óscar Mayol, explica que el cierre de la línea se hace cada año «para realizar las revisiones oportunas de mejora de las vías y velar así por la seguridad de los pasajeros».
Este año, se adelanta el cierre un mes «para hacer los trabajos de compactación de los túneles que sirven para reforzar las estructuras y, en concreto, en el túnel mayor hay que reforzar un tramo de la bóveda con hormigón armado». Para ello, durante estos meses trabajarán «entre unas 20 y 30 personas entre técnicos y la brigada», apunta Óscar. El servicio se reabrirá a principios de febrero de 2017, informa Mayol, «si no hay ninguna novedad el lunes día 6 de febrero, pero si acabamos las obras antes, abriremos antes».
Cabe destacar que desde el año 2006 se ha procedido a la renovación completa de unos 23,5 kilómetros de vía, siendo 19 kilómetros en la vía comprendida entre Palma-Sóller y 4,5 km en el tramo comprendido entre Sóller y Puerto de Sóller.
El Ferrocarril de Sóller une desde 1912 las ciudades de Palma y Sóller a través de 27 kilómetros de bellos paisajes y que conserva su carácter y estructura original a la perfección. Movido gracias a un automotor de tracción eléctrica, el tren de Sóller es el único de estas características que se encuentra actualmente en funcionamiento. A lo largo de su recorrido se desliza por trece túneles que atraviesan la Sierra de Tramuntana llegando en una hora a su destino final: Sóller, un pueblo que combina el encanto Mediterráneo con el aire cosmopolita de un puerto comercial abierto a Europa.
El 16 de abril de 1912, curiosamente el mismo día del hundimiento del Titanic, quedó inaugurada la línea ferroviaria que unía Sóller con la capital. El hombre clave en la creación del Ferrocarril de Sóller es, sin duda, Jeroni Estades i Llabrés, cofundador de la Compañía de Navegación Sollerense, parlamentario y sagaz hombre de negocios. Su visión de futuro le hizo apostar a principios de este siglo por el ferrocarril como medio de transporte entre Sóller y Palma de Mallorca, trayecto que hasta entonces sólo era posible por mar, y por la electricidad como fuente de energía del nuevo tren.
Luis Bobio fue el encargado de construir la línea de este particular ferrocarril, cuyas obras comenzaron en 1907, iniciándose de forma simultánea desde ambos extremos de la línea. El equipo de trabajo que empezó en Palma pudo contar con la ayuda de una pequeña locomotora llamada ‘María Luisa’; por su parte, los que partían de Sóller tuvieron que abrirse paso por la Sierra de Alfabía con mulas. Ambas brigadas se encontraron en un punto común en 1911 ante el asombro de los lugareños que no creían posible que ambos grupos se encontraran sin sufrir desviaciones en su trayectoria.
El presidente del Ferrocarril de Sóller asegura que las obras consistirán en reforzar la bóveda del túnel en un segmento de entre 50 y 70 metros muy próximo a la boca Norte de Sóller, una operación que nunca antes se había realizado. Los técnicos atribuyen el movimiento a un cambio de pesos en la vertical del túnel, probablemente causada por cambios en las bolsas de agua debidos a causas imposibles de señalar. Según Mayol el desplazamientos es inapreciable a simple vista y ha sido detectado gracias al seguimiento que los topógrafos realizan de forma periódica «y preferimos intervenir antes de que el problema sea más grave».
08-11-2016
A partir del 7 de noviembre el tren de Sóller cierra sus puertas hasta la próxima temporada. Un cierre que durará alrededor de tres meses para llevar a cabo las tareas de mantenimiento habituales y de consolidación de los túneles 1, 2 y 3 que atraviesa el tren centenario por la Serra d’Alfàbia. El presidente del Ferrocarril de Sóller, Óscar Mayol, explica que el cierre de la línea se hace cada año «para realizar las revisiones oportunas de mejora de las vías y velar así por la seguridad de los pasajeros».
Este año, se adelanta el cierre un mes «para hacer los trabajos de compactación de los túneles que sirven para reforzar las estructuras y, en concreto, en el túnel mayor hay que reforzar un tramo de la bóveda con hormigón armado». Para ello, durante estos meses trabajarán «entre unas 20 y 30 personas entre técnicos y la brigada», apunta Óscar. El servicio se reabrirá a principios de febrero de 2017, informa Mayol, «si no hay ninguna novedad el lunes día 6 de febrero, pero si acabamos las obras antes, abriremos antes».
Cabe destacar que desde el año 2006 se ha procedido a la renovación completa de unos 23,5 kilómetros de vía, siendo 19 kilómetros en la vía comprendida entre Palma-Sóller y 4,5 km en el tramo comprendido entre Sóller y Puerto de Sóller.
El Ferrocarril de Sóller une desde 1912 las ciudades de Palma y Sóller a través de 27 kilómetros de bellos paisajes y que conserva su carácter y estructura original a la perfección. Movido gracias a un automotor de tracción eléctrica, el tren de Sóller es el único de estas características que se encuentra actualmente en funcionamiento. A lo largo de su recorrido se desliza por trece túneles que atraviesan la Sierra de Tramuntana llegando en una hora a su destino final: Sóller, un pueblo que combina el encanto Mediterráneo con el aire cosmopolita de un puerto comercial abierto a Europa.
El 16 de abril de 1912, curiosamente el mismo día del hundimiento del Titanic, quedó inaugurada la línea ferroviaria que unía Sóller con la capital. El hombre clave en la creación del Ferrocarril de Sóller es, sin duda, Jeroni Estades i Llabrés, cofundador de la Compañía de Navegación Sollerense, parlamentario y sagaz hombre de negocios. Su visión de futuro le hizo apostar a principios de este siglo por el ferrocarril como medio de transporte entre Sóller y Palma de Mallorca, trayecto que hasta entonces sólo era posible por mar, y por la electricidad como fuente de energía del nuevo tren.
Luis Bobio fue el encargado de construir la línea de este particular ferrocarril, cuyas obras comenzaron en 1907, iniciándose de forma simultánea desde ambos extremos de la línea. El equipo de trabajo que empezó en Palma pudo contar con la ayuda de una pequeña locomotora llamada ‘María Luisa’; por su parte, los que partían de Sóller tuvieron que abrirse paso por la Sierra de Alfabía con mulas. Ambas brigadas se encontraron en un punto común en 1911 ante el asombro de los lugareños que no creían posible que ambos grupos se encontraran sin sufrir desviaciones en su trayectoria.
El presidente del Ferrocarril de Sóller asegura que las obras consistirán en reforzar la bóveda del túnel en un segmento de entre 50 y 70 metros muy próximo a la boca Norte de Sóller, una operación que nunca antes se había realizado. Los técnicos atribuyen el movimiento a un cambio de pesos en la vertical del túnel, probablemente causada por cambios en las bolsas de agua debidos a causas imposibles de señalar. Según Mayol el desplazamientos es inapreciable a simple vista y ha sido detectado gracias al seguimiento que los topógrafos realizan de forma periódica «y preferimos intervenir antes de que el problema sea más grave».