Ceuta recupero su centenaria estación
18-10-2016
Las obras de restauración de la antigua estación de ferrocarril se reanudarán en noviembre. El portavoz del Gobierno, Jacob Hachuel, anunciaba hace unos días que la empresa Dragados, encargada de la ejecución de las obras en la antigua estación de ferrocarril, firmará el próximo 3 de noviembre el acta de reinicio de los trabajos. Es probable que la empresa no agote el plazo de 30 días para proceder a la reanudación efectiva de las obras, puesto que ya ha desplazado a Ceuta el material para poder comenzar.
El Gobierno quiere que este equipamiento, una vez completada la restauración, cofinanciada por el Ministerio de Fomento a través del 1,5% Cultural, sea la sede de la Fundación Premio Convivencia, de la Consejería de Educación y Cultura. Además, el espacio se destinará a la habilitación de salas polifuncionales, salas de estudios y otros usos culturales que revertirán en beneficio del entorno, según señala el portavoz del Ejecutivo.
La estación es la cabecera de la antigua línea de ferrocarril que unía Ceuta con Tetuán inaugurada en 1918 y extinguida en los años 50. Se trata de un estilo historicista, ecléctico, si bien la estación del ferrocarril no se encuentra formalmente declarada como Bien de Interés Cultural sí se encuentra incluida en la Zona 1 de máxima protección en las Normas Urbanisticas del Plan general de Ordenación Urbana de Ceuta y es un edificio de interés arquitectónico e histórico.
La actuación plantea la restauración y rehabilitación del edificio para uso sociocultural conservando sus características arquitectónicas exteriores e interiores y colocando en el antiguo andén una de las primitivas máquinas utilizadas en la línea de ferrocarril hoy desaparecida.
La antigua estación era de estilo árabe tetuaní, con cuatro torres a modo de alminares. Disponía de una amplia superficie de terrenos anexos que se extendían desde los Jardines de la Argentina hasta los actuales pabellones de la Junta de Obras del Puerto. Se construyó en dos años y contaba con almacenes de explotación y talleres de la línea, así como muelles destinados al embarque de vehículos, mercancías y ganado, con sus correspondientes rampas al efecto. En el interior, sus patios centrales, servían de intercomunicación entre las distintas dependencias y servicios, mientras que los andenes cubiertos en forma de galería de arcos árabes, imprimían un sello de originalidad al edificio.
La línea fue utilizada sobre todo para el transporte de tropas y material militar durante la Guerra de Marruecos. Tuvo sus años de máximo esplendor entre 1920 y 1926. El final de la guerra en 1927 y la mejora de la carretera que unía Ceuta con Tetuán, además de la antigüedad del material ferroviario y la falta de repuestos de las locomotoras de carbón, harían perder importancia al ferrocarril, a pesar de la incorporación años después de catorce locomotoras de la línea Batel-Tistin, todas ellas en mal estado.
Recuperó actividad en la década de los 40 debido a la escasez de carburantes para vehículos. En 1942 el promedio de viajeros transportados al día era de 2.000 y el de mercancías de 4.000 toneladas. Pero en 1951 se suspendió el transporte de viajeros, quedando reducido el servicio exclusivamente a mercancías. Con la llega de dos modernas y lujosas locomotoras ‘mandiesel’, en 1995 se reanudó de nuevo el servicio de pasajeros con Tetuán, enlazando con el trasbordador, lo que permitía recoger y dejar a los viajeros a pie de pasarela. Hasta que en 1958 se cerró para siempre con la línea. Los automotores retornaron a la península, quedando aquí inmovilizados los viejos convoyes de madera y varias máquinas, hasta que 15 años después fueron subastados como chatarra.
Solo se salvó la locomotora C-1 ‘Ceuta’, la misma que circuló con el convoy inaugural el 20 de Mayo de 1918. Está máquina es de fabricación alemana. Se trata de una de las tres máquinas Tender, tipo 1-3-1, con tres ejes acoplados, frenos de vacío y dinamo para producir alumbrado eléctrico, con un peso de 60 toneladas. La C-1 Ceuta fue adjudicada en la subasta al Ayuntamiento para que fuese colocada en lugar público como homenaje.
(Imagen Spanish Railway)
18-10-2016
Las obras de restauración de la antigua estación de ferrocarril se reanudarán en noviembre. El portavoz del Gobierno, Jacob Hachuel, anunciaba hace unos días que la empresa Dragados, encargada de la ejecución de las obras en la antigua estación de ferrocarril, firmará el próximo 3 de noviembre el acta de reinicio de los trabajos. Es probable que la empresa no agote el plazo de 30 días para proceder a la reanudación efectiva de las obras, puesto que ya ha desplazado a Ceuta el material para poder comenzar.
El Gobierno quiere que este equipamiento, una vez completada la restauración, cofinanciada por el Ministerio de Fomento a través del 1,5% Cultural, sea la sede de la Fundación Premio Convivencia, de la Consejería de Educación y Cultura. Además, el espacio se destinará a la habilitación de salas polifuncionales, salas de estudios y otros usos culturales que revertirán en beneficio del entorno, según señala el portavoz del Ejecutivo.
La estación es la cabecera de la antigua línea de ferrocarril que unía Ceuta con Tetuán inaugurada en 1918 y extinguida en los años 50. Se trata de un estilo historicista, ecléctico, si bien la estación del ferrocarril no se encuentra formalmente declarada como Bien de Interés Cultural sí se encuentra incluida en la Zona 1 de máxima protección en las Normas Urbanisticas del Plan general de Ordenación Urbana de Ceuta y es un edificio de interés arquitectónico e histórico.
La actuación plantea la restauración y rehabilitación del edificio para uso sociocultural conservando sus características arquitectónicas exteriores e interiores y colocando en el antiguo andén una de las primitivas máquinas utilizadas en la línea de ferrocarril hoy desaparecida.
La antigua estación era de estilo árabe tetuaní, con cuatro torres a modo de alminares. Disponía de una amplia superficie de terrenos anexos que se extendían desde los Jardines de la Argentina hasta los actuales pabellones de la Junta de Obras del Puerto. Se construyó en dos años y contaba con almacenes de explotación y talleres de la línea, así como muelles destinados al embarque de vehículos, mercancías y ganado, con sus correspondientes rampas al efecto. En el interior, sus patios centrales, servían de intercomunicación entre las distintas dependencias y servicios, mientras que los andenes cubiertos en forma de galería de arcos árabes, imprimían un sello de originalidad al edificio.
La línea fue utilizada sobre todo para el transporte de tropas y material militar durante la Guerra de Marruecos. Tuvo sus años de máximo esplendor entre 1920 y 1926. El final de la guerra en 1927 y la mejora de la carretera que unía Ceuta con Tetuán, además de la antigüedad del material ferroviario y la falta de repuestos de las locomotoras de carbón, harían perder importancia al ferrocarril, a pesar de la incorporación años después de catorce locomotoras de la línea Batel-Tistin, todas ellas en mal estado.
Recuperó actividad en la década de los 40 debido a la escasez de carburantes para vehículos. En 1942 el promedio de viajeros transportados al día era de 2.000 y el de mercancías de 4.000 toneladas. Pero en 1951 se suspendió el transporte de viajeros, quedando reducido el servicio exclusivamente a mercancías. Con la llega de dos modernas y lujosas locomotoras ‘mandiesel’, en 1995 se reanudó de nuevo el servicio de pasajeros con Tetuán, enlazando con el trasbordador, lo que permitía recoger y dejar a los viajeros a pie de pasarela. Hasta que en 1958 se cerró para siempre con la línea. Los automotores retornaron a la península, quedando aquí inmovilizados los viejos convoyes de madera y varias máquinas, hasta que 15 años después fueron subastados como chatarra.
Solo se salvó la locomotora C-1 ‘Ceuta’, la misma que circuló con el convoy inaugural el 20 de Mayo de 1918. Está máquina es de fabricación alemana. Se trata de una de las tres máquinas Tender, tipo 1-3-1, con tres ejes acoplados, frenos de vacío y dinamo para producir alumbrado eléctrico, con un peso de 60 toneladas. La C-1 Ceuta fue adjudicada en la subasta al Ayuntamiento para que fuese colocada en lugar público como homenaje.
(Imagen Spanish Railway)