14-10-2016, 21:26
Portugal rechaza alquilar más trenes a Renfe
27-09-2016
Portugal da un portazo a Renfe y a Comboios. La operadora portuguesa tenía intención de recurrir a cinco trenes españoles mientras se revisaban diez convoyes pendulares. Comboios pretendía echar mano de los S-120. Pero el Gobierno socialista portugués de Antonio Costa rechaza los planes para alquilar más trenes de largo recorrido españoles, fundamentalmente para las líneas de Alfa Pendular, entre Faro y Braga, y regionales.
«La decisión está tomada. Se trata simplemente de no aceptar la petición que nos ha hecho Comboios de Portugal para una situación en concreto», señala el Ministerio de Infraestructuras. Pero eso «no quiere decir que no continuemos con los contratos en curso con Renfe, que deben ser cumplidos, y con las excelentes relaciones entre Comboios y Renfe», añadió.
La decisión se produce justo después del accidente del ‘Tren Celta’, que cubre el servicio en la línea Vigo-Oporto, que causó la muerte del maquinista luso al frente de los coches de origen español. “No tiene nada que ver un asunto con el otro. Queremos restar importancia a la polémica que se ha montado en Portugal con lo de los alquileres con España. Nosotros no teníamos nada apalabrado con Comboios», para continuar asegurando que «estamos haciendo nuestros estudios y decidiremos la mejor solución con calma», señalan fuentes del Ejecutivo.
Lo cierto es que, cuanto se produjo el descarrilamiento, se alzaron las voces contra este tipo de práctica, pues provocan que las cuestiones de fiabilidad y seguridad escapen al Estado portugués. Ahora se trata de los convoyes S-120. La polémica estalló el pasado jueves, en la primera sesión quincenal del Parlamento luso tras las vacaciones, cuando varios diputados del Partido Comunista llevaron al pleno la respuesta que les había dado el ministerio de Pedro Marques sobre la petición de Comboios de Portugal de alquilar más trenes a Renfe para cubrir las necesidades urgentes. La declaración oficial, en respuesta a una interpelación de los comunistas, aclara: «El Gobierno ha optado por no prolongar la decisión del anterior Ejecutivo de privilegiar y perpetuar la solución de alquilar material de circulación. Vamos a realizar análisis complementarios para un eventual refuerzo de la oferta».
El Ministerio de Infraestructuras confirmó por carta a los diputados comunistas «la intención de no alquilar más trenes de largo recorrido a Renfe y de buscar otras soluciones internas». Se da la casualidad de que el Partido Comunista, uno de los apoyos decisivos del Gobierno minoritario de Antonio Costa, defiende el final de dichos alquileres y apuesta por trenes de fabricación nacional y 100% portugueses.
Hace cuatro años comenzó a multiplicarse un 17% esta práctica bajo el mandato de los socialdemócratas de Passos Coelho, pero la puesta en marcha de esta solución correspondió al Gobierno socialista de José Sócrates en 2010. La marcha atrás del gabinete liderado por António Costa hace que CP considere la recuperación de coches retirados de servicio, previa remodelación, para ponerlos al día.
27-09-2016
Portugal da un portazo a Renfe y a Comboios. La operadora portuguesa tenía intención de recurrir a cinco trenes españoles mientras se revisaban diez convoyes pendulares. Comboios pretendía echar mano de los S-120. Pero el Gobierno socialista portugués de Antonio Costa rechaza los planes para alquilar más trenes de largo recorrido españoles, fundamentalmente para las líneas de Alfa Pendular, entre Faro y Braga, y regionales.
«La decisión está tomada. Se trata simplemente de no aceptar la petición que nos ha hecho Comboios de Portugal para una situación en concreto», señala el Ministerio de Infraestructuras. Pero eso «no quiere decir que no continuemos con los contratos en curso con Renfe, que deben ser cumplidos, y con las excelentes relaciones entre Comboios y Renfe», añadió.
La decisión se produce justo después del accidente del ‘Tren Celta’, que cubre el servicio en la línea Vigo-Oporto, que causó la muerte del maquinista luso al frente de los coches de origen español. “No tiene nada que ver un asunto con el otro. Queremos restar importancia a la polémica que se ha montado en Portugal con lo de los alquileres con España. Nosotros no teníamos nada apalabrado con Comboios», para continuar asegurando que «estamos haciendo nuestros estudios y decidiremos la mejor solución con calma», señalan fuentes del Ejecutivo.
Lo cierto es que, cuanto se produjo el descarrilamiento, se alzaron las voces contra este tipo de práctica, pues provocan que las cuestiones de fiabilidad y seguridad escapen al Estado portugués. Ahora se trata de los convoyes S-120. La polémica estalló el pasado jueves, en la primera sesión quincenal del Parlamento luso tras las vacaciones, cuando varios diputados del Partido Comunista llevaron al pleno la respuesta que les había dado el ministerio de Pedro Marques sobre la petición de Comboios de Portugal de alquilar más trenes a Renfe para cubrir las necesidades urgentes. La declaración oficial, en respuesta a una interpelación de los comunistas, aclara: «El Gobierno ha optado por no prolongar la decisión del anterior Ejecutivo de privilegiar y perpetuar la solución de alquilar material de circulación. Vamos a realizar análisis complementarios para un eventual refuerzo de la oferta».
El Ministerio de Infraestructuras confirmó por carta a los diputados comunistas «la intención de no alquilar más trenes de largo recorrido a Renfe y de buscar otras soluciones internas». Se da la casualidad de que el Partido Comunista, uno de los apoyos decisivos del Gobierno minoritario de Antonio Costa, defiende el final de dichos alquileres y apuesta por trenes de fabricación nacional y 100% portugueses.
Hace cuatro años comenzó a multiplicarse un 17% esta práctica bajo el mandato de los socialdemócratas de Passos Coelho, pero la puesta en marcha de esta solución correspondió al Gobierno socialista de José Sócrates en 2010. La marcha atrás del gabinete liderado por António Costa hace que CP considere la recuperación de coches retirados de servicio, previa remodelación, para ponerlos al día.