Talgo prueba en India que puede reducir los tiempos de los principales recorridos ferroviarios
Junio 16 2.016
Talgo se prueba en Asia. El Ministerio de Ferrocarriles de la India aceptó oferta hecha por la empresa española ferroviaria Talgo para demostrar, sin coste alguno, que sus trenes son más rápidos que los indios y pueden circular en sus vías sin necesidad de modificarlas. Talgo ha iniciado pruebas en el país con un tren de nueve coches entre las localidades de Bareilly y Moradabad, en el norte del país, muy cerca de Delhi. El deafío consiste en probar que “sus trenes pueden reducir esos tiempos porque son más ligeros y veloces”, explicó el portavoz del Ministerio, Anil Kumar Saxena.
“Dejémosles demostrar cómo ahorran tiempo sus trenes y cuán efectivos pueden ser sus servicios”, señalaron desde el Ministerio, de acuerdo con Saxena. El consejero delegado de Talgo, José María Oriol, viajó el pasado julio a la India, donde afirmó tras reunirse con el primer ministro indio, Narendra Modi, que en ese momento disponían solo “de una aprobación informal” para el proyecto. “Solo necesitamos un trozo de papel que diga: adelante”, dijo entonces Oriol, según el diario local The Times of India. En juego hay decenas de miles de millones de euros a la vista de que el país planea inversiones en la mejora de su ferrocarril por 142.000 millones de dólares en cinco años.
Talgo confía en su tecnología de pendulación para aumentar la velocidad de paso en las curvas. El fabricante eleva el centro de rotación sobre el centro de gravedad del sistema generando un sobreperalte. Con ello disminuye la aceleración lateral que siente el viajero cuando el tren aborda una curva.
El gigante asiático trata de mejorar los servicios, con especial hincapié en la velocidad, y está en la encrucijada de invertir en nuevas líneas o, simplemente, en trenes más eficientes (haciendo cambios menores en la actual infraestructura).
Talgo tiene ya un tren en pruebas viajando a 80 kilómetros por hora en la citada línea del estado de Uttar Pradesh. El test se mantendrá durante la primera quincena de junio con el objetivo de llegar a los 150 kilómetros por hora. La segunda fase llevará al Talgo a la ciudad de Mathura, donde el reto es rodar a una velocidad punta de 180 kilómetros por hora. Tal y como avanzó CincoDías el pasado mes de marzo, la meta final es que el material de la española pueda circular en el principal corredor de India, cubriendo los 1.400 kilómetros que separan la capital política de Delhi del corazón económico Bombai.
Esta última experiencia incluirá tramos a normal y alta velocidad, oscilando entre los 110 y los 180 kilómetros por hora. El avance de Talgo hasta esta última fase dependerá de los resultados alcanzados en la citada ciudad de Mathura.
La compañía que dirigen Carlos de Palacio y José María Oriol ha prometido a los responsables de la red ferroviaria que puede elevar la velocidad media de paso rebajando el coste energético un 30% y sin tocar los trazados. India cuenta con un entramado de vías de 60.000 kilómetros.
La velocidad de crucero del material rodante activo es de 80 kilómetros por hora entre las ciudades de Delhi y Bombai. Un viaje que precisa algo más de 17 horas en las actuales condiciones y que Talgo prevé rebajar para cubrirlo en un máximo de 14 a 15 horas, según sus simulaciones iniciales.
El ministro indio del Ferrocarril, Shri Suresh Prabhakar Praubu, visitó el mes pasado Francia para participar en un foro sobre países emergentes y con el objetivo de conocer los desarrollo de la SNCF en alta velocidad. El mandatario tuvo contacto al máximo nivel e invitó a Francia a participar en el desarrollo ferroviario de India. Para este mes está programada una visita de altos representantes del ministerio galo de Transportes así como del operador público ferroviario para abundar en la colaboración entre la citada SNCF e Indian Railways. Alstom y General Electric tienen un contrato de 7.000 millones de dólares para la producción de máquinas diésel y eléctricas en India.
Junio 16 2.016
Talgo se prueba en Asia. El Ministerio de Ferrocarriles de la India aceptó oferta hecha por la empresa española ferroviaria Talgo para demostrar, sin coste alguno, que sus trenes son más rápidos que los indios y pueden circular en sus vías sin necesidad de modificarlas. Talgo ha iniciado pruebas en el país con un tren de nueve coches entre las localidades de Bareilly y Moradabad, en el norte del país, muy cerca de Delhi. El deafío consiste en probar que “sus trenes pueden reducir esos tiempos porque son más ligeros y veloces”, explicó el portavoz del Ministerio, Anil Kumar Saxena.
“Dejémosles demostrar cómo ahorran tiempo sus trenes y cuán efectivos pueden ser sus servicios”, señalaron desde el Ministerio, de acuerdo con Saxena. El consejero delegado de Talgo, José María Oriol, viajó el pasado julio a la India, donde afirmó tras reunirse con el primer ministro indio, Narendra Modi, que en ese momento disponían solo “de una aprobación informal” para el proyecto. “Solo necesitamos un trozo de papel que diga: adelante”, dijo entonces Oriol, según el diario local The Times of India. En juego hay decenas de miles de millones de euros a la vista de que el país planea inversiones en la mejora de su ferrocarril por 142.000 millones de dólares en cinco años.
Talgo confía en su tecnología de pendulación para aumentar la velocidad de paso en las curvas. El fabricante eleva el centro de rotación sobre el centro de gravedad del sistema generando un sobreperalte. Con ello disminuye la aceleración lateral que siente el viajero cuando el tren aborda una curva.
El gigante asiático trata de mejorar los servicios, con especial hincapié en la velocidad, y está en la encrucijada de invertir en nuevas líneas o, simplemente, en trenes más eficientes (haciendo cambios menores en la actual infraestructura).
Talgo tiene ya un tren en pruebas viajando a 80 kilómetros por hora en la citada línea del estado de Uttar Pradesh. El test se mantendrá durante la primera quincena de junio con el objetivo de llegar a los 150 kilómetros por hora. La segunda fase llevará al Talgo a la ciudad de Mathura, donde el reto es rodar a una velocidad punta de 180 kilómetros por hora. Tal y como avanzó CincoDías el pasado mes de marzo, la meta final es que el material de la española pueda circular en el principal corredor de India, cubriendo los 1.400 kilómetros que separan la capital política de Delhi del corazón económico Bombai.
Esta última experiencia incluirá tramos a normal y alta velocidad, oscilando entre los 110 y los 180 kilómetros por hora. El avance de Talgo hasta esta última fase dependerá de los resultados alcanzados en la citada ciudad de Mathura.
La compañía que dirigen Carlos de Palacio y José María Oriol ha prometido a los responsables de la red ferroviaria que puede elevar la velocidad media de paso rebajando el coste energético un 30% y sin tocar los trazados. India cuenta con un entramado de vías de 60.000 kilómetros.
La velocidad de crucero del material rodante activo es de 80 kilómetros por hora entre las ciudades de Delhi y Bombai. Un viaje que precisa algo más de 17 horas en las actuales condiciones y que Talgo prevé rebajar para cubrirlo en un máximo de 14 a 15 horas, según sus simulaciones iniciales.
El ministro indio del Ferrocarril, Shri Suresh Prabhakar Praubu, visitó el mes pasado Francia para participar en un foro sobre países emergentes y con el objetivo de conocer los desarrollo de la SNCF en alta velocidad. El mandatario tuvo contacto al máximo nivel e invitó a Francia a participar en el desarrollo ferroviario de India. Para este mes está programada una visita de altos representantes del ministerio galo de Transportes así como del operador público ferroviario para abundar en la colaboración entre la citada SNCF e Indian Railways. Alstom y General Electric tienen un contrato de 7.000 millones de dólares para la producción de máquinas diésel y eléctricas en India.