01-09-2015, 08:54
Lo bonito es el rato tan agradable que compartimos. Alguno no piso ni el mercadillo, y con tan ilustres tertulianos.....cuando quisimos dar cuenta eran las dos y media de la tarde. Con ganas de seguir pero con otras obligaciones que nos reclamaban, tuvimos que despedirnos. Hasta mi hijo que por lo general suele estar ausente aunque de cuerpo presente, se encontraba integrado y comodo en un coloquio que no trata sobre sus aficiones.